Actualmente, el uso del suelo vinílico se ha popularizado tanto en empresas y negocios, como en hogares. Esto se debe, principalmente, porque el suelo vinílico es mucho más económico que otros materiales y a que su instalación es muy fácil. Cada vez hay más viviendas y negocios que cuentan con este tipo de suelo gracias a las grandes ventajas que este tiene frente a los demás materiales. Por ese motivo, en este post, te enseñaremos como puedes limpiar y mantener el suelo vinílico de forma adecuada, para que este luzca tal y como era cuando lo compraste.
El suelo vinílico, un tipo de instalación que surgió alrededor de los años 50, pero que hasta los años 70 no comenzó a instalarse de manera habitual. Algo que en un principio tan solo era una opción más, actualmente es mucho más popular de lo que pensamos y se ha convertido en una de las opciones más preferidas a la hora de escoger el suelo en el hogar. Este material, fabricado de PVC, es capaz de imitar la madera de forma fiel e incluso otros materiales como la piedra. La ventaja principal del suelo vinílico no es solamente lo económico que este resulta o lo fácil que es instalarlo, sino también la gran durabilidad que presenta frente a otros materiales.
Resistente y fácil de limpiar
El suelo vinílico puede durar una gran cantidad de años sin apenas sufrir grietas o rozaduras y, además, es muy fácil de limpiar debido a que no tiene junta. También es destacable la gran variedad de diseños de suelo vinílico que tenemos a nuestra disposición, otra gran ventaja por la que optar por este material. Otra gran característica del suelo vinílico es que este es impermeable y resiste la humedad de modo muy eficaz. Es por esta razón que podemos encontrar suelo vinílico en cocinas o baños, dos lugares de la casa en los que suele haber mucha humedad y suciedad. Por lo tanto, el suelo vinílico debe recibir una buena limpieza en estas zonas, en las que es muy sencillo que se ensucien.
En cualquier hogar es fundamental eliminar el polvo del suelo con un cepillo, una mopa o una aspiradora a diario, puesto que en un hogar es muy habitual que se acumule polvo. Si queremos mantener el suelo vinílico limpio, debemos retirar el polvo y esto contaría como una tarea de limpieza usual. Pero cualquier suelo requiere también una limpieza más profunda, con una mopa húmeda y un detergente neutro o un friegasuelos. Nosotros te recomendamos el Friegasuelos Limpross, de nuestra tienda. Si el suelo tiene manchas y requiere una limpieza un poco más especial, lo más recomendable es limpiar la mancha en el momento.
Eliminación de rastros
En muchas ocasiones puede ocurrir que derramamos algún líquido o producto que puede dejar rastro en el material vinílico. En este caso es fundamental actuar al momento y retirar la mancha con un trapo de nylon para después aclarar la zona con un poco de agua. Otros productos muy útiles para la limpieza de suelos vinílicos son los disolventes, si hemos derramado algo de pintura o desengrasante si la mancha es de aceite incrustado.