El mármol es un material muy utilizado en las casas por su elegancia y belleza. También es la protagonista de la limpieza por lo difícil que resulta abrillantarlo. A causa de la porosidad del mármol y a lo sencillo que resulta ensuciarse, abrillantar el mármol puede resultar, en muchas ocasiones un dolor de cabeza. Hoy te damos algunos consejos para dejar el mármol de tu casa brillante como el sol.
El mármol es una roca formada por rocas calizas y su componente básico es el carbonato cálcico. Cuando el carbonato cálcico se expone a altas temperaturas llega a cristalizarse y convertirse en mármol. Cuando la suciedad entra entre las ranuras y los poros del mármol el brillo del mármol se obstruye y se cubre. Si no limpiamos o abrillantamos cada cierto tiempo, no tendremos un mármol que luce como el primer día.
¿Abrillantar o pulir?
Abrillantar el mármol es un proceso un poco menos intrusivo que el pulido. Abrillantando el mármol devolvemos el brillo a esta superficie a la vez que la limpiamos eliminando las manchas. Se trata de cristalizar el mármol para devolverle el brillo. Cuando intentamos abrillantar una superficie de mármol agrietada, rayada o desnivelada no conseguiremos dejarle el brillo que deseamos. En este caso será necesario pulir.
Pulimos el mármol si este se ha estropeado, deformado o agrietado con el tiempo. En este caso pasamos una lija en la superficie del mármol perdiendo algunos milímetros o incluso centímetros según el resultado que queramos obtener. Normalmente, con los productos de pulido se utiliza para nivelar el mármol e igualarlo al resto de la superficie. Puede ser el caso del mármol sobre el que se pisa y hay más afluencia.
Abrillantado profesional
Para que una superficie de mármol recupere su brillo debemos, en primer lugar, detectar la procedencia de la suciedad. El brillo del mármol puede obstruirse con el tiempo por muchos motivos y según el motivo, necesitaremos realizar un tipo de limpieza u otro. La procedencia de la suciedad del mármol puede venir de las pisadas de zapatos de tacón, líquidos ácidos, suciedad de mascotas, etc. Las manchas que se dejan en el mármol y pasa mucho tiempo es suciedad que penetra y que se hace muy difícil de limpiar a la larga. Si detectas una mancha, retírala al momento.
No se puede abrillantar una superficie de mármol si antes no la hemos limpiado como es debido. Para conseguir la dos cosas en una podemos utilizar el abrillantador mármol terrazo A-9. Con este producto conseguiremos limpiar, abrillantar e incluso conservar la superficie. Recuerda que el mármol, aunque sea un material con una gran resistencia, es muy vulnerable a productos ácidos, pisadas, rayadas, etc. Deja la mezcla unos minutos y después retírala enjuagando con agua tibia y un trapo de algodón.
Para que la superficie no vuelva a perder el brillo, lo mejor que puedes hacer es protegerla mediante un lustrador. El lustrador es un producto parecido a la cera líquida que ayuda a que el mármol no vuelva a perder su brillo y se conserve en buenas condiciones durante más tiempo. Es un producto también muy recomendable para superficies de mármol muy expuestas a mucho tránsito y pisadas.